He
cogido el libro de mi vida
y
he doblado su última página.
Me
quedan aún hojas en blanco.
Voy
a llenarlas de poemas,
de
palabras amigas.
de
abrazos y de las risas
de
mis pequeñas hechizeras.
Mi
pensamiento solo volará
adonde
yo le deje.
No
más desesperanzas
ni
sueños anhelados
ni
frutas prohibidas.
MI
pulso se ha hecho firme
y
mi decisión no tiene quebranto.
Alguien sonreirá negándolo.
No
importa.
Se
hizo tarde.
No
hay marcha atrás.
Como siempre bello poema.
ResponderEliminarNunca es tarde, siempre hay otra ocasión, otro sueño que cumplir. Un abrazo Maribel
ResponderEliminar