El viento cruje
por fuera y por dentro.
Levanta el polvo,
el polvo tapa el suelo
y sube a las torres.
Se lleva las hojas rotas
y las heridas grabadas.
Me pongo gorro,
bufanda y abrigo
y salgo a afrontarlo.
Vendo mi corazón
con gasas blancas
Atravieso estas etapas frías,
como las cálidas,
mientras tirito o sudo
mi alma me acompaña
y mis horas fluyen
volando como el viento.
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