Saludo al sol sin quitarme el sombrero,
ahora no hay valiente que lo haga.
Saludo a las plantas,
son garantes de que todavía
podemos respirar.
Saludo a la gente que se afana,
vuelvo la cara a los contrarios.
Saludo al amor, a la amistad
que sin sabores, lo segundo
le gana a lo primero.
Saludo la generosidad,
mientras se me retuercen
las entrañas por el dinero
esclavo de los bancos.
Saludo a quién bien me sonríe,
vuelvo la cara a los que no.
Y te saludo a ti,
porque trato de recordar
solo lo bueno.
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