lunes, 11 de abril de 2022

UNA VIDA SIN GLORIA

 



 





Nací un día cualquiera

sin ser deseada.

Crecí con más penas

que dichas.

En el sorteo del amor,

malos números escogí.

Siempre abrumada

por muchas obligaciones.

Al llegar mi época dorada,

quise sentarme

a recoger mi maná,

pero los adherentes

deberes siguieron

pegados a mí.

Hoy esto, mañana aquello,

pasado, ¡ay! que anhelo

de sueños y libertad.

Cuando cierre los ojos

en mi postrer paseo,

entre nubes de algodón,

algo dejaré por hacer.

No creo en el paraíso,

pero deberían

abrirse sus puertas

sin tener en cuenta

eso que hice sin querer hacerlo.

Pura justicia

en una vida como otra cualquiera.

2 comentarios:

  1. Es un pasar un recorrido por nuestra vida unas veces mejor y otras peor pero siempre nos quedará algo por terminar. Como siempre me gusta como lo describes.

    ResponderEliminar
  2. Qué bonito este poema. A nuestra edad ya podemos hacer el balance de nuestra vida. Pero, al final, seguro que ha merecido la pena. ¿O no?

    ResponderEliminar