domingo, 21 de abril de 2024

GOBERNAR SIN ENTRAÑAS









De pronto, como mano del diablo,

nos atenazó una pandemia.

Un virus que buscó la salida

de un laboratorio

o voló solo por los aires.

Más de dos años vivimos en la casa

del demonio, fue un infierno.

Fue una red que nos atrapó en ella.

Y ahora, de nuevo, otra red

van tejiendo otros miedos.

Esas grandes potencias,

grandes en terribles armas,

mezquinas con los ciudadanos.

Apelan con todo cinismo,

que la vida es sagrada

hasta que se nace.

Después no se pueden contar

la de muertes infantiles.

Y los que no mueren,

se utilizan para tráficos poco lícitos,

o se les convierte en máquinas

de matar, soldados.

Esas potencias se miden

a ver cual es más mala.

Y nos toca vivir otra vez

apresados en el temor.

¿Qué va a pasar?

Los que tienen bunker

parece no importarles,

pero acostumbrados a vivir

con esclavitos,

que los llevan y los traen,

le abren las puertas,

les llenan las copas,

mientras juegan al golf

¿Qué harán cuando salgan

sin haberles dado nunca

un palo al agua?

Yo no lo veré, tengo ya

la vida vivida.

Mi terror es por los peques,

los que viven inmersos

en una buena infancia

que llorarán sin consuelo.

Si hay algo Supremo,

yo le pido que no lo consienta,

que corte esas intenciones

y lo que haga falta.

8 comentarios:

  1. No hay nada más terrorífico que la realidad, mientras pan y circo para distraer, mientras intereses ocultos tejen sus redes. Como siempre tan bien expresado el sentimiento que asusta.

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  2. Esta vez te has lucido en expresar lo inexplicable, el dolor que sentimos cuando ves esas caras inocentes de terror. Pienso puede ser mí familia, mis amigos, mis nietos. A qué grado de degradación llega el ser humano.

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  3. Has plasmado muy bien lo terrorífico de la situación. Esperemos que la cordura impere.

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  4. Que bien has sabido expresar lo terrorífico de la situación. Esperemos que triunfe la cordura.

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  5. Gracias por expresar tan bien lo que la mayorías sentimos.

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  6. La palabra es desgarrador. Y, por desgracia, real.

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  7. Este poema es desgarrador

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